¡Qué poco dura lo bueno!

1. ¡Qué corto ha sido este finde! Levantarse a las 7.30 de la mañana del sábado para irte a Valfer y que la tarde del domingo llegue en un suspiro... ¡No es justo!
Aún así el finde fue muy bien. Pasé parte del sábado por la mañana en una reunión absurda para elegir candidatos, con el concejal saliente diciéndome que me presentase. ¡En eso estoy pensando!
Tomamos el aperitivo y la tarde poniéndonos al día de todo lo que nos había pasado las últimas semanas y salimos. El tiempo no nos dejó pasear por la Alcarria y recoger espigas. Otra vez será.
Me encantó volver a oir las canciones de los 80 en el Burna.
El domingo presenciamos los efectos del cambio climático en carne propia. Amanecí lloviendo a mares, a la hora de comer hacía sol y a las 15'30 cayó una granizada de tres pares de narices. Y después sol otra vez.
Espero volver pronto para llenarme los pies de polvo con la arena de la Alcarria y el corazón con otro montón de risas.
2. Michel ha estado en el programa de Reyero. Algún día contaré "lo mío" con Michel. Pero me ha encantado lo que ha dicho y cómo lo ha dicho.
3. Buena semana a todos!!!

Vuelvo al hogar

1. Llevo dos meses "castigada" sin recreo y eso es demasiado tiempo para mí.

Tengo mono de sus calles, de sus gentes, de los chopos, los olmos y las encinas, de las amapolas y las margaritas, del aire puro de la Alcarria y el cielo azul sobre nuestras cabezas.

Quiero sentarme en la peña después de comer a no hacer nada y decidir a las 12 de la noche si salimos o no.

Así que mañana madrugaré (como si no hubiese tenido bastante durante la semana) y me acercaré a bailar con espigas. ¡Qué ganas!

2. No puedo parar de oir "Una y mil Veces", el último disco de Los Secretos. Me lo regalaron el sábado y no puedo parar.

"Que me quiten lo bailado, ya no sueño con volver. Los recuerdos del pasado, a ellos no renunciaré. Porque llenaste mi vida con un poco de ilusión. Sin apenas darte cuenta me enseñaste, con razón, que en la vida hay que escoger lo que ella te quiera dar. Si coguiste demasiado algo tienes que pagar. Pero yo no me arrepiento y, ahora que todo acabó, no te dedico un lamento sino un poco de mi voz"

Como el sol cuando amanece

1. Por fin he acabado los exámenes. Ha sido un día raro. Yo, que soy muy sentimental para casi todo, cuando tengo un examen me comporto de un racional que da asco.
Cojo mis apuntes con suficiente antelación, los subrayo con diferentes colores y me organizo pensado: "Este día me estudio esto, este día tengo menos tiempo así que esto que es menos, este día hay partido así que solo repaso" y lo apunto en las hojas. Después me lo estudio. Que no me lo estudio, me lo leo y lo que recuerde bien y lo que pues ya me apunto en post-it o lo que sea. Cuando he acabado con todo me hago un esquema con lo que recuerdo y repaso sobre ese esquema. Como mucho una semana.
Para este último examen (Historia del Periodismo español) solo he tenido 4 días y tenía que estudiar un montón de nombres de periódicos, personajes, fechas, leerme un libro y sacar las respuestas a diez preguntas de ese libro. Hasta ayer por la mañana pensaba que lo llevaba bien. Por la tarde me dio por pensar que no me sabía nada. Falsa alarma.
Vi el partido muy tranquila (todo lo tranquila que yo puedo estar viendo al Madrid en Champions) y me fui a dormir a la una después de un último repaso. Pero dormí fatal. Y eso en mí es una malísima señal.
Me he despertado a las 6 acordándome de los periódicos de la Guerra de la Independencia y no he podido volver a dormirme. Peor señal.
Al llegar a clase todo el mundo estaba preguntándose cosas y yo no me acordaba de las respuestas. Miraba mis esquemas y me sonaba todo a chino. Estaba atacada.
Cuando me han dado la hoja con las preguntas he apuntado todo en lápiz porque me daba la mpresión de que me olvidaba por momentos.
Al final ha ido bien. Eso sí, el becario del departamento se ha pasado todo el examen merodeando a mi alrededor porque "no pareces la del DNI". "¿Te enseño otro carnet?" "No,no, déjalo".
El caso es que ya soy libre otra vez. Libre para poder leerme todos los libros que me tengo que leer, hacer los trabajos correspondientes, escrbir unos guiones para un programa de radio y otro de tv... Pero eso será el lunes.
2. Me gustó el primer tiempo del Madrid. Me encantó que Raúl vuelva a ser el mejor Raúl y Beckham el mejor Beckham. Solari salió a la palestra otra vez en mi casa. Parece que se acuerdan de él. A mí me pasa desde antes de que se fuera.

Como el sol cuando amanece

1. Por fin he acabado los exámenes. Ha sido un día raro. Yo, que soy muy sentimental para estas cosas, cuando tengo un examen me comporto de un racional que da asco.
Cojo mis apuntes con suficiente antelación, los subrayo con diferentes colores y me organizo pensado: "Este día me estudio esto, este día tengo menos tiempo así que esto que es menos, este día hay partido así que solo repaso" y lo apunto en las hojas. Después me lo estudio. Que no me lo estudio, me lo leo y lo que recuerde bien y lo que pues ya me apunto en post-it o lo que sea. Cuando he acabado con todo me hago un esquema con lo que recuerdo y repaso sobre ese esquema. Como mucho una semana.
Para este último examen (Historia del Periodismo español) solo he tenido 4 días y tenía que estudiar un montón de nombres de periódicos, personajes, fechas, leerme un libro y sacar las respuestas a diez preguntas de ese libro. Hasta ayer por la mañana pensaba que lo llevaba bien. Por la tarde me dio por pensar que no me sabía nada. Falsa alarma.
Vi el partido muy tranquila (todo lo tranquila que yo puedo estar viendo al Madrid en Champions) y me fui a dormir a la una después de un último repaso. Pero dormí fatal. Y eso en mí es una malísima señal.
Me he despertado a las 6 acordándome de los periódicos de la Guerra de la Independencia y no he podido volver a dormirme. Peor señal.
Al llegar a clase todo el mundo estaba preguntándose cosas y yo no me acordaba de las respuestas. Miraba mis esquemas y me sonaba todo a chino. Estaba atacada.
Cuando me han dado la hoja con las preguntas he apuntado todo en lápiz porque me daba la mpresión de que me olvidaba por momentos.
Al final ha ido bien. Eso sí, el becario del departamento se ha pasado todo el examen merodeando a mi alrededor porque "no pareces la del DNI". "¿Te enseño otro carnet?" "No,no, déjalo".
El caso es que ya soy libre otra vez. Libre para poder leerme todos los libros que me tengo que leer, hacer los trabajos correspondientes, escrbir unos guiones para un programa de radio y otro de tv... Pero eso será el lunes.
2. Me gustó el primer tiempo del Madrid. Me encantó que Raúl vuelva a ser el mejor Raúl y Beckham el mejor Beckham. Solari salió a la palestra otra vez en mi casa. Parece que se acuerdan de él. A mí me pasa desde antes de que se fuera.

Le petit Nicolas

1. Hoy han vuelto las clases. No he acabado los exámenes, no, pero las clases han empezado. En periodismo somos así.
El caso es que iba yo en el circular, acalorada, con la carpeta, el bolso, la bufanda, el abrigo y un interesantísimo libro sobre agencias de información en la mano y dormidísima. Dormidísima hasta que un niño me ha arreado una patada en la espinilla y me ha sacado de mi letargo. ¡Mira tú que majo! Entonces le dice la madre:"Oye, pide perdón".
-Perdona, ¿te duele?
- No pasa nada. Y no, no me duele.
-¿Vas al cole?
-Sí, ¿y tú?
- Yo también, al cole de los pequeños, porque tengo cinco años y soy un trasto. ¿A que sí, mamá, a que soy un trasto? (La madre asiente y sonríe) Yo me llamo Nicolás, ¿y tú?
- Yo Laura. Encantada.
Era su estación y Nicolás me ha dicho "Adiós, Laura". El chaval me ha animado el día, a pesar de la patada.
2. Mi abuelo cumple hoy 86 años. Tan pronto como acabe con tanto estres (el miércoles) voy a tirarle de las orejas. Él dice que no, pero está hecho un chaval.
3. La situación política de mi pueblo está peor que IU en la Comunidad de Madrid. Tres meses para las elecciones y no hay ni candidatos ni nadie que quiera serlo. Esto es un desastre

Jamás duró una flor dos primaveras

Celebré el último San Valentín con rosas. Este año no hay rosas, pero hay RISAS. Yo las prefiero. Vale que no huelen igual de bien, pero tardan menos en marchitarse.

Todo ha sido un sueño...

1. Ayer vi "El Ilusionista". A mí lo que más ilusión me hacía era volver a las tardes de cine con Irene después de muchos meses. La peli me gustó mucho, mucho, pero con Edward Norton era fácil que me gustase. La tarde me gustó más.
Tenemos que repetir.
2. He hablado con Ana, mi amiga la arqueóloga, "la Indiana Jones de Las Musas", después de un montón de meses. Lo primero que me ha dicho es que si es verdad que me voy a Transilvania. ¿Qué rumores circularán en el barrio sobre mí? Definitivamente tengo que quedar con ellos. Al menos para hacer acto de presencia.
Además, en junio acaba la carrera y no sabe si empezar a currar de arqueóloga o hacer el segundo ciclo de traducción e interpretación.
Me abruma que la gente tenga tantos planes.
3. La semana pasado tuve que mandar por correo un trabajo sobre la huelga de hambre de De Juana y la declaración de Ibarretxe ante los tribunales. Ahora tengo que hacer otro sobre las fotos que publicó el New York Times y me he quedado sin nada que decir. Estoy atascada.
4. El sábado hay un tributo a los Hombres G en el Burna con música en directo. La semana pasada me perdí uno de Mecano. Este también me lo pierdo por el maldito examen de Historia del Periodismo Español. Estoy atascada y jodida.
Será una buena semana.

Que calle ahora o le callen para siempre

No soy persona de odiar a nadie. Ni siquiera me gusta esa palabra. Antes que odiar prefiero ignorar directamente a esa persona y punto. Pero creo que hoy puedo decir bien alto que odio a Peñafiel. Es que no puedo con él. Es verle en la Tv y, casi por instinto, cambiar de canal.
No soy monárquica y mi republicanismo va disminuyendo a la misma velocidad que mi confianza en la política, en que el Madrid gane algún título este año, en que acabe el terrorismo, en dormir del tirón 12 horas o en cumplir algunos de mis sueños.
Sí soy una de tantas españolas que no es monárquica pero sí juancarlista. Me cae bien el Rey y su familia. Me parece un señor campechano, simpático, agradable. ¿Qué se lo lleva calentito por no hacer nada? Bueno, pues es uno de tantos. La culpa es del sistema.
Letizia no me cae ni bien ni mal. Creo que de momento no la conozco lo suficiente para decir si me gusta o no como Reina. Sí es cierto que me cae mejor que cuando se anunció su compromiso, pero una cosa normal.
El caso es que esta mañana en "Las Mañanas de Cuatro" estaban hablando de lo bien que lo había hecho ayer Letizia, de lo fuerte que fue, del detallazo que tuvo al hablar con la prensa (lo de detallazo lo digo yo, conste) y del payaso de Peñafiel y una artículo que había escrito un poco salido de tono. Como el propio Peñafiel.
Cada vez que oigo hablar de Peñafiel lo primero que se me viene a la cabeza son sus palabras en el programa de la Campos el día que murió Carmina Ordóñez: "¿qué cómo estarán sus hijos? Pues seguro que pensando que por fin pueden descansar de esa madre."
Ya no es solo que ese hombre no tenga corazón, es que su falta sentido común, de saber estar, de educación y de respeto son la leche. La desvergüenza con la que escribe esas columnas panfletarias son de juzgado de guardia y el odio enfermizo hacia Letizia no se lo cura ni House.
Claro, que todo esto también me lleva a preguntarme ¿quién tiene más culpa: Peñafiel, que con sus actos demuestra que es un estúpido integral, o los periódicos que publican esa basura y las radios y televisiones que le dan minuots para que siga dando el coñazo?
Hoy me da vergüenza que ese ¿señor? se defienda diciendo que él es periodista y cumple su trabajo. Me da vergüenza que sea periodista. Pero también me ha hecho pensar que igual no está tan mal tener una Reina periodista.
Peñafiel va a conseguir con sus palabras lo que no hizo Franco: Acabar con los republicanos de España.

Adelante por los sueños que aún nos quedan

1. Ayer estuve en el cine viendo "Noche en el museo". Me cae bien Ben Stiller y me gustó mucho la película. Me reí un montón. Después de una semana sin ver una sola peli ya lo estaba necesitando.
2. El otro día Lucía, la niña de mis ojos, me dijo por teléfono: "Voy a cantarte una canción a ver si te la sabes". Me cantó enterito el "Adelante" de Operación Triunfo. Y ahí estaba yo, sentada en la silla, con el teléfono en la mano, cayéndoseme la baba y pensando que lo hacía mejor que todos los de las 5 ediciones juntos. ¡Qué bobos nos vuelven los niños!
3. Del Madrid y de los exámenes y trabajos ni hablo porque no se cuál de los me tiene más quemada.
4. Me han regalado un libro de poemas de Nicanor Parra, "Chistes para desorientar a la poesía". He tenido que prometer que no empezaré hasta que acabe los exámenes, que me despisto.
5. De unas semanas a esta parte mis borracheras de fin de semana son de risas y sueños por cumplir.