Si hay personal, que la tire Corbalán

Se suponía que esta semana iba a asistir a un seminario sobre Comunicación en el Ejército de Tierra, pero se suspendió. Nos informó un soldadito (que no era marinero) el mismo lunes a la puerta del Cuartel del Ejército de Tierra en la calle Prim. Nos ganamos que un soldado se pusiera chulo con nosotras intentando no darnos ninguna explicación. "A ver, ¿con quién so creéis que vais a hablar sino conocéis a nadie?" "Con que baje el que nos ha convocado a las cinco y nos ha dado plantón, me vale". No pude contenerme.
El caso es que, a cambio, me he apuntado a otro curso sobre Comunicación y Deporte en la misma facultad. Este año es sobre baloncesto. Ayer vinieron cuatro periodistas especialistas en baloncesto y José Luis Llorente. A mí me hizo mucha ilusión porque me acordaba de cuando sus hermanos jugaban en el Madrid de fútbol. El tema fue el mundial de 2006. Proyectaron el último cuarto de la final y aplaudimos los triples de Garbajosa, nos reímos con Montes y nos emocionamos con Gasol. Al menos yo.
Hoy era el día estrella. Venían Romay, Epi y Corbalán. Al final solo hemos visto a Corbalán y ha merecido la pena. Nos ha hablado con una sinceridad aplastante. Era como estar oyendo a un padre dar consejos a sus hijos, explicándonos sus vivencias como jugador, ya que la mayoría no le vimos jugar. Supuestamente íbamos a ver un resumen de la final de los JJOO de los Ángeles 84, en que ganaron la plata, pero al final nos han puesto los últimos minutos del EEUU-URSS de los Juegos de Munich. Yo no sabía que la final fue así.
Pese a todo me quedo con Corbalán. Me da rabia no haber nacido antes para verle jugar y me alegro de haber ido a esa conferencia. Me ha devuelto la ilusión por el baloncesto. "Por el verdadero baloncesto" en sus propias palabras.
Ya me estoy descargando la final del 84. Aunque ya sé que perdimos seguro que me emociono.