La espiga y el olivo que retoñan

1. Hacía casi tres años que no nos veíamos tranquilamente, con tiempo de sobra para hablar, tomar algo y ponernos al día. Ayer quedé con mi amigo Javi, al que todos mis demás amigos conocen como "El cantautor", porque compone las mejores canciones que he oído nunca.
Durante estos casi tres años me acordaba frecuentemente de Javi, nos mandábamos algún correo y escuchaba muy a menudo una cinta que me había grabado con canciones suyas al piano.
Las cosas han cambiado un montón desde esa última vez que nos vimos. Él estaba empezando a decorar su vida (y un piso) y ahora ya ha decorado otro, muy bonito y acogedor; y yo aún no había redecorado mi vida.
Fue un placer comprobar que nuestras vidas han cambiado (a mejor) pero nosotros seguimos siendo los mismos. Además de una cena estupenda me regaló una copia en cd de aquella vieja cinta con algunos temas nuevos. Y tocó el piano para nosotros, como en los viejos tiempos. Y yo volví a sentir que es una injusticia que toda España no pueda disfrutar de esas canciones, de sus chistes, sus letras y sus reflexiones. Todo porque "no ha sitio para este tipo de música en el panorama discográfico actual". Pues vaya un panorama que tenemos.
Para mí siempre será el más grande. El amigo entre amigos y el músico entre músicos.
Nos vemos pronto.
2. No os podéis imaginar la vergüenza que me causa ver el Debate sobre el estado de la nación. Será que se me había olvidado ya el del año pasado. ¿De verdad estos son los políticos que nos merecemos? ¡Vaya panorama (otra vez)!