Vuela esta canción para tí, Sabina...
Y si El Nano pide un trago...
Alfonso (mi compañero sabinero) y Nuria consiguieron que entrásemos de los primeros y nos colocamos en la misma verja que separa el público del escenario. Para mí era un sueño imaginar tan cerca a los dos maestros.
Acababa de leerme la biografía de Sabina y el otro día volví a ver (por infinita vez) la serie "Vientos del pueblo", sobre la vida de Miguel Hernández, mi poeta favorito sin lugar a dudas, y había escuchado cientos de veces la cinta de Serrat con sus poemas. Estaba en situación para vivir una noche cargada de emociones y buena música. Pero no imaginaba que fuese tanto.
Sabina fue más Sabina que nunca, más rockero que nunca, más poeta que nunca, con su bombín y la chaqueta de un frac, irónico y divertido. El maestro de maestros.
Además, tocó temas antiguos, que poca gente conocía, lo que nos permitió disfrutar de su incomparable voz. A Hoy puede ser un gran día, Fiesta, Señora, Aquellas pequeñas cosas o tu nombre me sabe a yerba se unieron pronto las míticas Lucía, Penélope y Mediterráneo.
No puedo quedarme con un momento de las tres horas de buena música que disfruté.
Uno de los más emocionantes: cuando el par de pajarracos sobre el escenario empezaron a cantar Cantares. Fue hacia la mitad del concierto. "Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace camino y al volver la vista atrás se ve la senda que nuna se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino, sino estelas en la mar". Me parece de lo más bonito que se ha escrito nunca. Y ahí estaban ellos dos, recitándolo a nuestros oídos.
Pensé: "como canten una de Miguel Hernández ya si que me da algo".
Al final del concierto ya se me había olvidado.
Al final del concierto ya se me había olvidado.
Fue entonces cuando Sabina entonó eso de "Para la libertad sangro, lucho, pervivo..." Y Serrat siguió con el resto. Me debatía entre las ganas de grabar ese momento y conservarlo para la posteridad, las de gritar la canción más que nadie en el Palacio y las de retener las lágrimas. Entonces, casi como un mensaje que llevaba esperando todo el día, y juntos, los maestros cantaron: "porque soy como el árbol talado que retoño. Aún tengo la vida. Aún tengo la vida".
Para mí, son los dos mejores compositores en español.
Serrat y Sabina no pudieron hacerme mejor regalo que el concierto de anoche.
Yo hoy no puedo hacerle mejor regalo a Joao que ese verso
2 comentarios:
Pues si crees k con Alejandro Sanz te kedaste corta, con estos has sacado todos sentimientos eh?
Siento no compartir tu gusto ni por Sabina ni por Serrat, pero entiendo y siento la ilusion k te hace estar cerca de tus artistas preferidos y sentir k cantan para ti todos sus temas, y la verdad k es muy emocionante.
Algo parecido senti yo con Miguel Bose.
Un beso, y buen finde!
RUTH
Joao: muchas gracias!
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